En la Audiencia Pública Juvenil realizada este martes por la tarde, los chicos y chicas plantearon sus proyectos de vida y problemáticas que interfieren es ese desarrollo: la naturalización de la violencia policial hacia jóvenes de barrios populares y limitaciones en la oferta académica. Propusieron crear una línea de denuncia anónima de apremios, avanzar hacia la ciudad universitaria y promover la alimentación saludable a través de la agricultura familiar.

La primera en exponer su visión fue Virginia Carabajal, quien se refirió al trato policial a los jóvenes de los barrios populares: “Está naturalizado el hostigamiento y la violencia”, dijo, proponiendo la creación de una línea gratuita de denuncia anónima, además de exigir la identificación de los efectivos y modificar los contenidos en la formación policial.
Mateo Grandío, como estudiante secundario, manifestó la incertidumbre de muchos compañeros que deben buscar fuera de la ciudad la carrera profesional, por no encontrarla dentro de la oferta académica local. “Sería una lástima desaprovechar” la obra del campus de la Universidad Nacional de Río Negro “que está paralizada”. Y mocionó que Bariloche se transforme en una ciudad universitaria, generando nuevas alternativas y “un ambiente propicio para que los estudiantes nos quedemos acá, con incubadoras de empresas, campus, etc”.
Por último, Florencia Criado coincidió con el diagnóstico en relación a las dificultades que encuentra para la formación. Como estudiante de Agronomía, planteó la necesidad de implementar en juntas vecinales, escuelas y espacios comunitarios más capacitaciones gratuitas sobre huertas, viveros y alimentación saludable.


El Presidente de la Audiencia, Ramón Chiocconi, felicitó a los jóvenes por las exposiciones: “Cuando se dan los espacios, lo que hacen es maravilloso”, valoró, destacando que participaron jóvenes que están recorriendo diversos programas participativos, como Concejal Por Un Día. En la misma senda, el presidente del Concejo, Diego Benítez, estimó que “todo lo que promueva la participación juvenil es de suma importancia”.
Este mecanismo fue propuesto por estudiantes del CEM 2 en el marco del programa “Concejal por un Día”, y sancionado en 2014 como Ordenanza para que los jóvenes puedan ser escuchados acerca de las problemáticas y propuestas que les interesan, y se conviertan en protagonistas del desarrollo y el mejoramiento de la ciudad en donde vivimos.