Para ello, la Municipalidad arbitrará los medios y recursos económicos necesarios a fin de que sus espacios administrativos y de intervención se adecuen a esta ordenanza.
La ordenanza se proyecta como herramienta de transformación simbólica para pasar de un Estado mono-cultural hacia uno pluricultural y tolerante, que garantice el derecho a la identidad.
Además busca que se declare como días conmemorativos, con carácter de no laborables para quienes comparten el Kamarikun y Wiñoy Xipantü como expresiones de su espiritualidad y pertenencia al Pueblo Mapuche.