Pablo Orellano, representante de la firma TresB, presentó este miércoles en la Comisión Legislativa, presidida por Diego Benítez (JSB), los avances en los desarrollos para el tratamiento de los distintos tipos de residuos que llegan al vertedero municipal.
Recordó que en 2017 el Municipio cedió a la empresa en comodato un lote en el vertedero, para edificar un laboratorio para el tratamiento de residuos orgánicos. El 1 de febrero del año pasado comenzaron a realizar los ensayos en la turbina para la generación de electricidad con biogás. Describió los aspectos metodológicos y beneficios ambientales, además de repasar las experiencias de otros países y ciudades argentinas.
Estimó que Bariloche genera aproximadamente 100 toneladas diarias de residuos (unos 600 gramos per cápita), que ingresan en 25 camiones. Un 40 por ciento, orgánicos y otro 20 por ciento irrecuperables (residuos sanitarios, por ejemplo). Sin embargo, señaló que para proyectar las condiciones de las plantas de tratamiento es indispensable contar con un estudio exhaustivo de la cantidad y composición de los materiales.
En base a la experiencia de trabajo y los ensayos realizados, Orellano proyectó que por cada 100 toneladas de residuos se obtendrían 2,4 de biometano, transformables en 400 KW eléctricos. Económicamente, la producción total de energía sería de 3500 MWh, equivalente a 525 mil dólares al año a valores actuales de la energía. Además de ser autosustentable, se evitaría la filtración de lixiviados a las napas por la descomposición de los orgánicos.
TresB también avanzó en el tratamiento experimental de los residuos forestales, que fueron chipeados y los utilizaron como combustible para gasificadores, poniendo en marcha tres prototipos con exitoso resultado. La caldera podría tener un uso social o comunitario, para energía térmica a las viviendas.
Para los plásticos, se diseñó una cámara para producción de combustibles líquidos y un sistema de procesamiento a escala de laboratorio. La primera planta piloto se instalará en Jacobacci para que la producción se utilice como combustible de La Trochita, transformando así un residuo en un recurso económico.
Finalmente, por la problemática de contaminación causada por las pilas, se implementó un método de hidro metalurgia. A diferencia de los procesos con los residuos forestales y plásticos, no se trata de un sistema autosustentable, pero el beneficio ambiental sería importante.
La exposición de Orellano en el Concejo está enmarcada en una serie de reuniones que se vienen realizando con los vecinos cercanos al vertedero, para el análisis de la situación actual y la planificación del sitio regional de disposición final de los residuos. Participaron concejales, referentes barriales y el subsecretario de Medio Ambiente, Claudio Romero.