Por iniciativa de la concejal Cristina Painefil y la organización Alas de Amor, el programa “Un árbol autóctono por cada bebé” incluirá a las familias que sufrieron la pérdida antes de nacer.
El 28 de Abril el Concejo Deliberante aprobó por unanimidad, la Ordenanza que crea este programa de forestación barrial, que compromete al Municipio a plantar anualmente la misma cantidad de árboles que niños nacidos (aproximadamente 2.500). De esta forma, las familias tienen acceso a una especie autóctona o frutal a través de la Dirección de Parques y Jardines de la comuna.
En la sesión de este jueves, también por unanimidad, los ediles incorporaron al programa a las familias de hijos no nacidos. “Es una propuesta que elaboramos con Alas de Amor, con quienes venimos trabajando en distintas iniciativas”, valoró Painefil, recordando la emotiva actividad realizada recientemente por el aniversario de la organización.