Estimó que el mayor o menor compromiso de un gobierno con los sectores populares “puede morigerar los efectos de un sistema injusto y sentar las bases para producir cambios en el sentido de la igualdad o profundizar las diferencias”. Y consideró que si bien la macro economía no es un tema de los gobiernos municipales, “se debe apelar a todos los instrumentos que se tengan a disposición para proteger el bolsillo de nuestros vecinos”.
Describió que el sistema de comercialización de la mayoría de los productos y en especial los de la canasta familiar “está claramente dominado por las grandes cadenas de supermercados que imponen el precio a los productores y también establecen el precio al consumidor”.
En este contexto, Painefil evaluó que “resulta inevitable que el Congreso de la Nación elimine el Impuesto al Valor Agregado (IVA) sobre los alimentos de la canasta básica, para que –de esta manera- se aumente el poder adquisitivo de los sectores más necesitados”, entendiendo que con esta medida, “se estará aliviando la pesada carga de la inflación y elevando el nivel de consumo focalizado”.