“Homenajear a un recién nacido, y a la familia en su conjunto, con la entrega de un árbol autóctono, es una manera simple y efectiva de brindar una mejor calidad de vida”, consideró la concejal Cristina Painefil, la impulsora de la iniciativa , añadiendo que “de esta manera, ese niño irá creciendo al mismo tiempo en que lo hace el árbol que llegó a la familia junto a él, y ambos recibirán los cuidados para su correcto desarrollo”.
Según los datos aportados por el Hospital y sanatorios locales, 2500 bebés llegan al mundo anualmente en Bariloche. El procedimiento establecido es sencillo: es un beneficio universal, al que se accederá sólo con la presentación de la partida de nacimiento. Parques y Jardines establecerá los convenios necesarios con otras instituciones para proveerse de los ejemplares, y asesorará a las familias, dependiendo del barrio, sobre la especie aconsejada, el lugar indicado para la plantación y los cuidados necesarios.
El Municipio deberá plantar anualmente la misma cantidad de árboles que los niños nacidos, por lo que aportará a los barrios que más requieran de la forestación aquellos ejemplares que no sean retirados por las familias.
El Proyecto presentado por Painefil, Julia Fernández, Claudia Contreras, Viviana Gelain, Diego Benítez, Gerardo Ávila y Andrés Martínez Infante (JSB) tomará estado parlamentario en la sesión de este jueves.