El encuentro se dio en el marco de la Comisión Legislativa donde los ediles escucharon a funcionarios de la empresa de telecomunicaciones, quienes aspiran a mejorar la calidad del servicio telefónico. Expusieron la necesidad de ampliar la cantidad de antenas en la ciudad para mejorar la calidad de los servicios. Los directivos explicaron la situación actual del servicio brindado y sostuvieron que para elevar su calidad será necesaria la instalación de infraestructura adecuada que cumpla con las exigencias legales y con la aceptación de los vecinos de la ciudad.
Bariloche cuenta hoy con 22 antenas y estiman que deberían colocarse alrededor de 15 más para favorecer los servicios de comunicación local. Las mismas, serian situadas sobre postes de alumbrado público, para aprovechar el espacio utilizado y reducir el impacto visual.
La regulación de instalación de antenas y estructuras de telecomunicaciones esta regulada en la ciudad por la ordenanza 1995-CM-09, la cual limita el emplazamiento de este tipo de infraestructura en terrenos o edificios particulares o públicos sin permiso municipal. A su vez, prohíbe las instalaciones en una distancia menor a 200 metros de centros de salud, educativos, clubes y centros sociales.
La fundamentación de la ordenanza vigente se basa en el impacto visual, ambiental y sanitario, por las radiaciones que emiten este tipo de antenas. Actualmente la Organización Mundial de la Salud (OMS) investiga los posibles efectos de las radiaciones no ionizantes sobre la salud de las poblaciones y se han establecido parámetros de protección.
En este sentido, los directivos de Telefónica presentaron a los concejales una serie de investigaciones y mediciones que se realizaron en Esquel y Villa Mercedes (San Luis), en la que se demostró que los niveles de seguridad que estable la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) son adecuados, e inclusive por debajo.
Respecto a las mediciones realizadas en Esquel durante el 2013, los resultados arrojaron 0,002 megavatios por centímetro cuadrado cuando la CNC indica como máximo valores entre los 0,4 a 0,9.
Con los estudios presentados, la empresa de telecomunicaciones aspira a disipar la polémica que genera la instalación de antenas frente a las necesidades tecnológicas que deja el acelerado crecimiento poblacional de la ciudad. Proponen realizar los estudios locales correspondientes de medición para emplazar la infraestructura de la que hoy carece Bariloche.